| SALUD | Transcripción de la reunión con el gerente del Hospital de Segovia, Jorge Elízaga, en Cuéllar el 22.09.21
Los estudios de la gerencia estiman que en el entorno rural la cifra adecuada de cartillas que
debe atender cada médico oscila entre 400 y 800. Existen zonas en las que el médico
únicamente tiene 100 o 150 pacientes asignados, por lo que serán estos médicos los que deberán aumentar su número de cartillas asignada. Estos “nuevos” pacientes serán los que actualmente están asignados a médicos jubilados (su plaza no se ha cubierto por un nuevo médico), es decir, que no tienen un médico fijo, lo cuál supone un problema grave de calidad de la atención, ya que, estos pacientes hasta ahora son atendidos cada vez por un médico distinto.
Existe un problema de falta de médicos, pues las plazas de médicos que se jubilan no son
cubiertas por médicos nuevos. Los ponentes explican que esto no es un problema puesto que estas plazas fueron creadas cuando la población en la provincia era mayor, y que actualmente no son necesarios tantos médicos, volviendo a justificar la eliminación de dichas plazas con el bajo ratio de pacientes por médico, asegurando que no va a disminuir la calidad de la atención primaria. Además, inciden que incluso puede mejorar el aprendizaje profesional de los médicos
al atender más pacientes que hasta ahora.
Por otra parte, siguen defendiendo la figura del “medico de área” como refuerzo para hacer
guardias y sustituciones. Aclaran que con este tipo de plazas no se pretende sustituir plazas de médicos fijas de ningún consultorio.
Actualmente, la plantilla de la ZBS de Cuéllar está compuesta por 14 médicos y 10 enfermeros.
El médico con menor ratio tiene 390 cartillas asignadas, por lo que no se baraja reducir el
número de médicos. El objetivo de la gerencia en esta ZBS es aumentar el número de plazas de enfermería para equiparar el cupo de pacientes entre médicos y enfermeros.
En la sala se pone en conocimiento de los ponentes que hay médicos cercanos a la jubilación y que no hay ninguna solución a corto plazo para cubrir esas plazas, a lo que la gerencia reconoce que va a suponer un problema. Además, desde la sala se expone que no se está atajando la raíz
del problema, la falta de médicos, si no que únicamente se están redistribuyendo los pacientes entre los médicos que hay actualmente disminuyendo la frecuencia de visita en cada consultorio y, en definitiva, reduciendo la calidad del servicio. La gerencia justifica que ha solicitado una convocatoria extraordinaria del examen MIR para los aspirantes que no habían superado esta
criba, pero que no se pueden generar médicos de la noche a la mañana. Tampoco contemplanuna mejora de las condiciones de los puestos de trabajo, ni económicas ni de otro tipo, ya que consideran que ese no es el problema.
Otro de los problemas que se comparten es la falta de espacio en el actual centro de salud de
Cuéllar, se está hablando del aumento de plazas de enfermería, pero esto debe ir acompañado de un aumento de recursos, tanto de espacio físico como de equipamiento, para que puedan desempeñar su trabajo adecuadamente. La gerencia contesta que no todas las nuevas plazas son para que se queden en el propio centro de salud de Cuéllar, aunque acaba admitiendo el problema. A raíz de lo anterior, se reclama que se licite el nuevo centro de salud de Cuéllar, ya que lleva años aprobado el proyecto, pero aun así se han realizado otros centros de salud antes
como el de Carbonero o el centro de salud de Segovia 4, actualmente en construcción,
considerando de esta forma que se está ninguneando a Cuéllar en este aspecto. La gerencia contesta que es una cuestión que han tratado las personas que estaban antes en la gerencia y que ahora mismo no disponen de la información adecuada para explicar las razones de este suceso, aunque si añaden que les han comunicado que el proyecto está avanzando.
Desde la sala se hace hincapié en que el aumento de plazas de enfermería no es suficiente y que también haría falta al menos una plaza más de medicina para crear un servicio de urgencias de 24 horas sin que afecte negativamente a las consultas matutinas. Además, se traslada la
demanda de una UVI móvil para la ZBS. La gerencia únicamente contesta que la solicitud de la UVI móvil está hecha a lo que se le pregunta si hay fecha de concesión del servicio, y la gerencia responde que los contratos de concesión finalizan a mediados de 2.022, entonces será cuando se conozca si efectivamente se ha otorgado el servicio a Cuéllar.
Por otra parte, la gerencia expone de forma tajante que la cita previa ha venido para quedarse, y que no es discutible que es una medida que mejora la eficiencia del sistema. Desde la sala ponen en conocimiento los problemas que esto genera en una población rural envejecida.
En cuanto al centro de atención diaria, la gerencia explica que está pensado para que se pueda acudir a él los días que no haya consulta en algún pueblo cercano en vez de ir al centro de salud de Cuéllar. Es decir, no pretender cerrar consultorios locales y sustituirlos por este centro de atención diaria. Añaden, que por el momento es una opción que se baraja a largo plazo y que su
consecución dependerá del consenso entre los propios trabajadores sanitarios, la población y
los ayuntamientos de los pueblos afectados. No explican cómo se realizará esta ardua tarea de poner a todas las partes de acuerdo. El emplazamiento pensado sería la zona sur de la ZBS de Cuéllar. Desde la sala se expone que este tipo de centro va a favorecer en un futuro que sea más sencillo cerrar los consultorios de los pueblos más pequeños.
Por último, la gerencia reconoce que el método a demanda en poblaciones menores de 50
habitantes no ha funcionado por lo que van a pasar a corregirlo. De esta forma, para las
poblaciones que tengan entre 20 y 50 habitantes acudirá el médico y el enfermero cada quince días de forma alterna de manera que todas las semanas acuda uno u otro. En los pueblos con menos de 20 habitantes todavía se está estudiando la situación y no tienen ninguna solución."
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